Intentándo relajarme [Libre]

Me había ido de casa para poder dar una vuelta y así alejarme de mi "querida"familia, aunque solo fueran unas horas, la verdad esque no tenía muchas ganas de estar con ellas ya las había soportado bastante en el viaje, a ellas y a mi querido amigo Bryan, cada vez sentíaq ue el tenía más tirria, pero aun más a mis hermanas que estaban de lo más histéricas. Anne, se alteraba con solo dirigirle la palabra, por lo cual no quería ni dirigirle la palabras no fuer a aser que le diera un algo malo. Y Cass... Bueno mi melliza era de lo peor, en cuanto le gritabas cuatro cosas que ponia como una bestia a despotricar y a largarse de casa, menuda forma de intentar solucionar las cosas, no era para nada razoneble, y estaba ya harta de todas estas situaciones, por lo cual me quería ir de casa cuanto antes, y sobre todo terminar mis estudios, y poder largarme de casa, no había echado de menos a mis padres en todo el viaje, pero ahora queria verlos, tenerlos de nuevo cerca mio, abrazar a mi madre con sus cálidos brazos que siempre me infundían confianza en mi misma, y tranquilidad para no alterarme, pero ahora ya me habían tocado las narices, y no pensaba ir a dormir a casa, prefería dormir en medio del bosque y así no ver a mi familia.

Estaba en el linde del bosque con el acantilado, mientras me sentaba con la espalda pegada a un árbol, y observaba las olas de ir y venir por la fuerza del agua y las oía chocar contra las rocas fiereza.
Respiré profundamente y cerré los ojos con fuerza intentando recordar los días que estaba todabía con mis padres y era feliz en cierto sentido.

Me dirigí hacía el acantilado, uno de los lugares a los que
mas me gustaba ir de la push.
Iba con aire tranquilo y relajado, ver el mar desde allí y escuchar los sonidos de mi alrededor, que no eran para nada de una ciudad, si no todo lo contrario, eran relajantes.
Me fije a lo lejos y vi una silueta en el otro lado del acantilado, me fui acercando mas y la distinguí enseguida, sin lugar a dudas, era Bianca, sonreí para mis adentros y fui corriendo asta su posición abrazándola por detrás y pillándola desprevenida .
- ¿Qué tal esta mi princesa hoy? – le dije con una sonrisa en mi rostro y dándole un beso en el cuello.

Me quedé con los ojos cerrados, sintiéndo como el aire me alborotaba el pelo, y lo despejada que me sentía en aquel lugar, que notaba como si mis dolres de cabeza y problemas se los llevara el viento s con sus fuerte idas y venidas.

Abrí los ojos rapidamente al notar que alguien me abrazaba por detrás, pero enseguida supe de quien se trataba, se trataba ni más ni menos que de Collin, que se había acercado por el acantilado, me alegraba saber que aun habiendo pasado tiempo los dos sabíamos donde nos podíamos encontrar sin dificultad.

-¡Collin!-dije dándome la vuelta y abrazándolo, tirándolo para atrás y cayendo los dos al suelo-aquí se está cómoda-bromee, mientras le besaba.

Me preguntó por como estaba y me incorporé, dejando ir mis ojos por el mar de nuevo y suspirando con gesto quedado.

-Cansada del viaje, y de... Bueno da igual-dije quitándole importáncia al tema, y sonriéndole.

En cuanto supo quien era se giro y me abrazo haciendo que cayéramos los dos al suelo, me reí por lo que dijo y acto seguido me beso, pero cuando hice la pregunta de que como estaba la note un poco rara… aparte estaba como ida, ella intentaba hacer como si no pasara nada y n importara, pero a mi si me importaba lo que le pasaba y quería saber las cosas por si la podía ayudar, además así de paso se desahogaba un poco y eso siempre era bueno, nunca había que aguantarse las cosas y acumularlas ya que con el tiempo siempre seria peor.
-¿Cómo que no tiene importancia?... – dije levantándome asta
su posición y después acariciándole la mejilla con dulzura.
-Para mi si la tiene, me gustaría ayudarte, o por lo menos me gustaría saberlo… si me lo cuentas así te desahogarás y te sentirás mejor…

Me encogí de hombros por que lo había dicho, además no me gustaba mucho hablar de las cosas que me pasaban, no me gustaba molestar a la gente ni hacer que se sintieran mal por mi culpa, y aun menos si era Collin, precisamente, pero bueno si lo que me pasaba no era nada del otro mundo, por lo cual daba igual la cosa.

-No quiero... Hacer mal a nadie con mis problemas la verdad-dije bajándo la mirada hasta el suelo.

Posé mis mano sobre la suya, en mi mejilla, y sonreí, mientras le daba un suave beso en la mejilla, y otro en la comisura de los labios.

-Mis hermanas... Que están mal de la cabeza, no las entiendo, y bueno... Al menos Anne está con las hormonas revolucionadas con el novio y me saca de quicio-dije poniendo los ojos en blanco.